La joven se estremeció y la confianza que acababa de adquirir en sí misma se esfumó en ese instante. Con Pedro casi había olvidado su ceguera; ahora, se la obligaba a recordar su situación y el esfuerzo que la misma significaba para su madre. La voz de Pedro sonó como un latigazo, y la chica de inmediato se dió cuenta de que estaba enfadado.
— Señora Chaves, mi nombre es Pedro Alfonso; soy el hermanastro de Facundo. Estuve algunos meses fuera del país, pero al regresar me enteré del accidente y quise saber cómo estaba su hija. Le agradecería que me autorizara a llevar a Paula a pasear en mi coche mañana por la tarde. ¿Te parece bien a las dos, Pau?
— Eso no será posible. Paula tendrá que descansar mañana — afirmó Alejandra, antes de que la joven respondiera.
— Paula es una joven sana, y le hace mucho bien salir.
— Pau está ciega, señor Alfonso —replicó Alejandra, con visible ira—. La respuesta es no. Ahora, discúlpenos por favor...
—Dos cosas, señora Chaves. En primer lugar, procuraré alentar a Paula para que sea lo más independiente posible. En segundo lugar, vendré a buscarla mañana a las dos. Si cuando venga, me dice que no puedo verla, derribaré la casa, ladrillo a ladrillo, hasta encontrarla. Espero que me haya entendido.
Perpleja, Paula sintió que él apoyaba las manos sobre sus hombros y, tras darle un beso, le dijo:
—Te veré mañana, Pau. Gracias, una vez más, por una hermosa noche.
Al salir, cerró la puerta. El hecho de que él hablara así y la tocara, había dado a la chica el valor que necesitaba.
—Tienes razón, mamá, estoy cansada. Es mejor que me vaya a la cama. Te veré por la mañana, y podrás contarme entonces cómo te ha ido. Buenas noches.
El silencio fue la respuesta. Paula subió la escalera hacia su dormitorio, pensativa. Gracias a Pedro había conseguido cierta segundad en sí misma, aunque no mucha. Probablemente, debido a la sorpresa, Alejandra no había dicho más. Pero la batalla no había terminado.
Pero qué mala la madre, buenísima la maratón.
ResponderEliminarMuy buenos capítulos! pero qué le pasa a Alejandra!? menos mal que Pedro la puso en su lugar!
ResponderEliminarMe mata de amor esta historia!!
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