miércoles, 28 de octubre de 2015

Dulces Sueños: Capítulo 59

Rosa se quedó un poquito más hablando del pasado y se fue luego que Pedro reapareció en el living con las nenas, había sido una larga mañana, Rosa prometió a Paula que volvería para contarle más sobre lo que sabía, y si lo haría pronto.
-¿Porque esa carita? – preguntó Paula a Pedro dándole un besito. – No te preocupes, Rosa me dijo cuanto me amas, y que eres un buen chico, que no quería lastimarme. – Pedro sonrió. – yo también te amo, mucho. – se dieron un beso apasionado frente a las nenas, pero eso ya era normal, se amaban y ellas lo sabían.
-Mañana ya serás mi esposa. – dijo Pedro mirándola a los ojos, esos ojos preciosos que tenía, tan brillantes como diamantes. – No veo la hora de que acabe la ceremonia. – Paula se echó a reír.
-¿Pero porque quieres que acabe tan rápido? – le preguntó ella.
-Para poder hacerte mía de verdad. – le dió otro piquito. – Quiero saber como es hacer el amor con mi esposa, y eso me parece más rico que hacer el amor con mi novia. – ella se sonrojó, también deseaba ese momento, desde aquel día ni siquiera habían intentado hacerlo, ya que estaban esperando el tan precioso día. – Gracias a Dios ya esta llegando, porque no puedo aguantar la abstinencia que me pusiste, jaja.
-Tontito, eso es para que todo quede más lindo mañana, verás… - se besaron de nuevo y las nenas los miraban con una sonrisa, era lindo el amor de sus padres.
Es cierto cuando queremos que el día pase, no pasa, así fue, la tarde ha pasado rápido, pero la noche fue una eternidad, Paula no podía conciliar el sueño, y cuando vió a Pedro roncando se retiró de la cama y fue hasta el sofá, la verdad nada estaba cómodo, estaba ansiosa para el día siguiente, a parte, jamás había casado y no sabía como sería, pero estaba segura de que todo iba a ser lindo. Cuando pudo dormir ya casi amanecía y en menos de dos horas se despertó con el timbre, era su mamá, la primera vez que había ido ahí, igual traía muchas cosas en mano y una amiga para ayudarla a arreglar y estar divina en aquel día tan especial para su hija.
-Oh mamá, de verdad muchas gracias. – la abrazó. – No pensé que vendrías acá ayudarme. – estaba tan feliz, pero algo raro estaba sintiendo, como mariposas en la panza, los mareos que habían sentido el otro día, cuanto más se acercaba a su casamiento más intensos eran. - ¿Te dejo papá?
-Si mi vida, quiero que ese día sea el más lindo de su vida, como el mío, no estabas ahí, pero fue magnifico. – le sonrió. – Estás tan pálida mi vida ¿Sientes algo?
-No he dormido bien, sabes como es ¿No? Estoy tan ansiosa que ni la cama estaba cómoda ayer. – su mamá se echó a reír. – Y también hace un tiempo sentía unos mareos y nauseas, creo que ahora sé porque me sentía así, por lo ansiosa que estaba, porque hoy están peores.
-Jajaja, así es mi vida, me sentí igual que tu. – sacó de una maleta maquillajes, un color más lindo que le otro. - ¿Y tu vestido?
-La chica me lo trae a la tarde, es bellísimo mamá. – le sonrió.
-No dudo, siempre tuviste un buen gusto. – Alejandra  empezó a sacar todo lo que había traído, hasta su ropa, porque se arreglaría ahí junto con su hija, no la dejaría ni siquiera un minuto sola. - ¿Y tu novio?
-Aun duerme, jaja, creo que a él no le agarró insomnio.
-Ah, los hombres son así mi vida, todos iguales. – se rieron, en ese instante las nenas llegaron a la sala, las dos de pijamas y con caras de sueño, sentaron en el sofá. – Hola nenas. – saludo la mamá de Pau.
-Hola abuelita. – dijo Jessica mirándola y sonriendo.
-Hola abu. – saludo Soledad, aun con los ojitos cerrados.
-Jajaja, mis nenitas, siguen durmiendo aun ¿Por qué no quedaron en la camita? – Paula abrazó una por una, estaba feliz por tener las dos ahí, y más porque Victoria había dejado que Jessica durmiera aquella noche allá. – Aun falta mucho para el casamiento y para que puedan arreglarse. – las miro con ternura. - ¿Quieren algo?
-Leche. – dijeron las dos.
La madre de Paula observaba cada gesto de su hija, cada palabra con las niñas y como las amaba, se veía de lejos, pero se veía en los ojos de Pau que aun no estaba completamente contenta, por más que quería estarlo, le faltaba algo…

2 comentarios:

  1. Definitivamente, estoy convencida que Jessica es la hija de Pau. Me encantaron los caps.

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  2. Hermosos capítulos!!!! Ojalá Jessica sea la hija que tanto busca!

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