viernes, 16 de enero de 2015

Una Dulce Inocencia: Epílogo

Alguna vez creí, que el encuentro con ella sería distinto. Mi mente procesaba dos opciones. En una la veía ser dura e hiriente, como siempre la recordaba desde esa última vez. Y en la otra, ella me pedía perdón por todo y aunque no lográbamos conectarnos en sentimientos nuevamente, las cosas quedaban en paz… Pero ella no sentía nada por mí, y yo tampoco por ella. No había palabras de perdón o de odio… Sólo había silencio.
- Sólo he venido a… He venido a darte esto.- extendí la caja hacia ella.
- ¿Qué es esto?.- consultó antes de tomarla.
- Es toda mi vida.- sonreí.- Quería demostrarte que tus últimas palabras aquella vez… No se cumplieron conmigo.-
Me sentí mal por decir aquello, pero era la única razón por la que había ido escribiendo desde que había aprendido, cada momento que pasaba en mi vida… Por la que cada foto importante, había sido copiada y en ella había una réplica exacta de cada sonrisa que se enmarcaba en ellas… Un pedazo de cada objeto o detalle que había recibido a lo largo de mis casi 21 años, estaba allí… Como una muestra viviente, que yo sí había sido feliz. Y que mi vida era perfecta…
- Lo siento por eso.- contestó incómoda por mi comentario y tomó la caja que le ofrecía.
La abrió y observó lo primero que mostraba. Una foto con mis padres y hermanos. Y en la otra, una con mi propia familia. Mi hijo y mi esposo.
- ¿Es mi nie…? Perdón.- carraspeó.- ¿Es tu hijo?.
- Es mi pequeño Tony.- no la corregí. Porque los títulos se ganan y ese era de mis padres.
- Gracias.- sonrió por primera vez.
- De nada.- mordí mi labio con fuerza.- Es todo.- me encogí de hombros.- Venía sólo a eso.
- Lamento todo Lourdes.- expresó para mi sorpresa.
- Yo no tengo nada que disculparte.- le aclaré.- No te odio, y nunca lo he hecho… Te agradezco cada cosa que hiciste…- sonreí.- Cada paso del pasado, me llevó a lo que soy hoy.
- Gracias.- volvió a repetir.
- Tengo que irme.- me moví para llegar hasta la puerta.- Hay una carta para tí allí.
- La leeré.- me confió.
No hubo despedidas cariñosas, ni para recordar. Solamente hubo un adiós y una pequeña sonrisa… Mentiría si dijera que el camino de regreso a casa fue tranquilo. Lloré por última vez a causa de ella. Terminé de derramar las últimas lágrimas de ese capítulo de mi vida que hoy se cerraba para siempre… Me bajé del auto, y caminé a casa… Abrí la puerta y miles de risas se escucharon desde la sala… Me asomé y allí estaba mi familia. Mis padres, hermanos, mi esposo y mi hijo… que era el causante de que todos rieran.
Mi madre me observó y le sonreí para dejarle saber que estaba bien. Ahora todo estaría bien…

"Encontrarás hojas en blanco en los primeros cuadernillos. Cada hoja representa lo que fue mi vida a tu lado. Porque aunque me duela, no he querido escribir episodios que al leerlos, lo menos que saquen sea una sonrisa.
No te odio, y nunca lo voy a hacer. Porque compartimos un vínculo, que aunque sea débil, es eterno. ¿Sabes por qué no siento rencor? Por mi madre, por Paula. Ella me enseñó a recordarte de la mejor forma. No con cariño, porque eso se va creando, pero te recuerdo sin rencores.
Hoy soy madre, y aunque me esfuerzo por comprender como no fui capaz de despertar en tí algún sentimiento… He aprendido a no ser una copia tuya. Tengo una conexión preciosa con mi hijo. La misma que creó Paula entre nuestros corazones.
Te deseo lo mejor, porque me diste vida y el mejor regalo que ni tú misma sospechaste. Me diste una familia: un padre, una madre y hermanos. Un hijo y un esposo. Felicidad a su lado y amor eterno con ellos… Y espero lo mismo para ti. Por siempre, porque todos necesitamos una segunda oportunidad… Yo la tuve y deseo que tú también la tengas.
No sé si nuestros caminos volverán a conectarse algún día… No me opongo a eso, pero tampoco lo anhelo. Sólo Dios sabe cómo se escribirán nuestros destinos… Aunque el mío, ya tiene un recorrido seguro. Las mismas cosas que leerás aquí, serán lo primero que llegue a publicar cuando sea una Literaria como mi madre… Porque seguí sus pasos, estudio Literatura como ella…
...Como la niñera que llegó un día cualquiera a mi vida, y se convirtió en mi madre…
…De niñera a mamá…
Lourdes.-"


FIN

5 comentarios:

  1. Ayyyyyy, Dios mío, qué manera de derramar lágrimas con este final. Hermosísimo Naty. Bellísima historia nena. Gracias x compartirla con todas las que leímos. GRACIAS!!!!!!!!!

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  2. Me llore
    todo Nati.. Gracias por compartir esta historia que ame !!

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  3. Hermosa novela y hermoso final, el amor puede borrar los malos recuerdos... que lindo, gracias Naty.

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  4. Hermoso final! Y sí! Lourdes tenía que cerrar el capítulo con su madre, para disfrutar de su verdadera familia en paz! Hermosa historia! Gracias por elegirla y compartirla con nosotras!

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  5. Esta novela me hizo llorar horrores!! Hermosa! @jesica_tkd

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