sábado, 28 de febrero de 2015

Una Cita con el Amor: Capítulo 57

– ¿Qué pasa? – pregunté extrañada.
– No lo sé – trató de encenderlo tres veces y no funcionó.
– Creo que se descompuso, que lata, me choca rentar autos, no sabe uno quien los usa ni si les dan mantenimiento.
– ¿Y qué haremos?
– Esperar un poco, quizá sólo necesita enfriarse.
Me acomodé en el asiento y eché mi cabeza atrás en el respaldo. Él hizo lo mismo, pero me di cuenta que jugaba con sus manos. De pronto, se volteó y me miró sin decir nada, yo me acomodé de lado para verlo también, acarició mi rostro y puso un mechón atrás de mi oreja, yo sostuve su mano, entonces, se acercó y me besó despacio, sin intentar algo más, yo le respondí de la misma manera, pero bajé su mano con la mía y la puse sobre uno de mis senos, él comenzó a acariciarlo lentamente, mi mano buscó los botones de su camisa y empecé a desabrocharla y a acariciar la piel que iba quedando al descubierto. Él se separó y echo su asiento hasta atrás, con sus ojos verdes me invitó a que me sentara sobre él y eso hice.
Volvimos a besarnos mientras él metía sus manos debajo de mi suéter y acariciaba mi piel. Besé su cuello y su torso, desabroché el cinturón y el pantalón, me separé y me quité el suéter, él se acercó y besó la parte superior de mis senos que salía del sostén en tanto yo acariciaba su masculinidad, él me desabrochó el pantalón y me acarició por encima de las bragas, jadeé al sentir sus caricias.
–Pau, no debiste ponerte pantalón – se quejó con la voz entrecortada.
– No tenía planeado hacer esto y menos aquí.
Me sonrió y entonces, yo me senté en el asiento del copiloto y me saqué el pantalón y la ropa interior mientras él bajaba el suyo hasta las rodillas después de sacar un condón del bolsillo.
– ¿Acaso eres dueño de esa empresa? – pregunté al tiempo que se lo colocaba.
– No, pero me gusta estar prevenido, uno nunca sabe en qué momento se darán las cosas – respondió mientras me atraía a su cuerpo.
Me senté sobre él con las piernas a los lados y entró en mí, empecé a moverme lentamente, con mis manos sobre el respaldo del asiento, él movía las suyas de mis muslos a mis nalgas. Nuestros rostros estaban pegados por la nariz, nos mirábamos, jadeábamos en sincronía, a la par que nuestros cuerpos se fundían en uno. Aceleré los movimientos, él me sostenía por las caderas, nos besamos apasionadamente en tanto los movimientos se volvían más frenéticos, buscando un solo objetivo. Rompí el beso y puse mi boca en su cuello moviéndome aún más rápido y segundos después sentí como mi cuerpo se estremecía al llegar al éxtasis total al mismo tiempo que él.
Me quedé así unos minutos, mientras nuestras respiraciones recobraban su curso normal, lo besé nuevamente y luego de un lapso me separé, al pasarme al otro asiento no sé cómo, creo que con el codo hice sonar la bocina del auto. El soltó una risa divertida y yo también. Me puse la ropa mientras él se acomodaba la suya. Encendió el auto que respondió a la primera y lo miré sorprendida, arqueando una ceja.
– Está bien, me pillaste y me confieso culpable, jamás falló el auto – aceptó con una sonrisa en los labios.
– ¡Me engañaste!, eres un mentiroso y un tramposo – dije cruzándome de brazos.
– Tú eres la causante de todo, me vuelves loco, no podía esperar hasta la noche para tenerte entre mis brazos.
– ¿En serio? – pregunté un tanto sonrojada.
– Por supuesto, no sé qué me pasa cuando estoy contigo que pierdo el control, eres un peligro Paula Chaves, nublas mi mente y no me permites ver las cosas con claridad.
– Quizá debas remitirme a las autoridades – respondí jugando.
– Eso haré, pero tu condena será estar encerrada en un cuarto conmigo, sin oportunidad de fianza ni de apelación.
– Eso sí me da miedo – exclamé y me abracé a mí misma.
– Debería, en serio, ya no sé qué otra locura podría cometer, eres una hermosa tentación andante.
– Definitivamente deberían encerrarme, en una torre alta sin accesos.
– Y yo iría a rescatarte – dió la vuelta en la siguiente esquina
– ya no puedo imaginar mi vida sin tí, definitivamente me hechizaste.


5 comentarios:

  1. Hermosos capítulos! me encantan los celos de Pedro! Pero paula no puede seguir haciéndose la tonta con Facundo! la engaña de acá a la China!

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  2. Qué geniales los 3 caps Naty. Me encantan las locuras que hace Pedro para estar con Paula jajajaja.

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  3. Buenísimos los caps, cada día más atrapantes... ahora bien; Facundo o se la come o la engaña mal; Pau creo que debe cortar con Facu y Pedro jugarse por un sentimiento más firme, aunque me encantan las locuras que hacen para estar juntos.

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  4. Aiiii me encantan!!!!! Son hermosos!, Facundo la recontra engaña d acá a Japón! Jajajajaja, espero muy muuuuuuuuuy ansiosa los prox caps, bsoo @GraciasxTodoPYP

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  5. buenísimos los capítulos!!!!

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